En 1585 la iglesia de San Sebastián de Villapalacios ya llevaba casi un siglo en pie. No sabemos, con precisión, la fecha exacta de su construcción y de su consagración, pero seguramente fue antes de finales del siglo XV, porque sabemos que en ese momento ya había un cura de Villapalacios, que por entonces se llamaba Cenillas, que fundó una capellanía en la iglesia de San Miguel de Alcaraz. El caso es que en 1585 el edificio no presentaba un interior acorde con las necesidades del culto, no tampoco contaba con los recursos para acometer estos trabajos e, incluso, para poder pagar la cera para que una vela ardiera las 24 horas del día, símbolo, para la religión cristiana, de que Jesucristo y Dios, permanece en ese edificio para iluminar a la comunidad. Lo resume una frase del texto que se estudia:
Es tan pobre que con la renta que tiene no se puede hacer y la necesidad de lo susodicho es mucha.
Por eso, el concejo acordó, con fecha del 20 de octubre, en una reunión monográfica, ayudar a la iglesia con una aportación extraordinaria en forma de limosna (1).
Se trataba de la venta de la pámpana, la hoja de la vid una vez cortado su fruto, a beneficio de esa vela y del material y el coste para poder embaldosar la iglesia. La venta de estas hojas era una práctica común en ese momento y tiempos después. El dueño del terreno o pago, en vez de esperar a que la llegada del otoño la hoja se marchitara y se cayera, vendía el derecho a que el propietario de un rebaño entrara en su finca y sus animales se la comieran, consiguiendo así un beneficio extra.
Conocemos ejemplos de esta práctica en otras localidades de la provincia como Almansa o Villarrobledo, zonas con gran riqueza y producción vitivinícola.
En el caso de Villapalacios, en este momento la producción del vino no tenía que ser muy extendida. En las Relaciones Topográficas de Felipe II, fechadas en 1578, apenas siete años antes, (2) puede leerse como parte de la respuesta a la pregunta XXIII en la que se les pregunta sobre “las cosas que en ella más se cogen, y los ganados que se crían, y si hay abundancia de sal para ellos y para otras cosas necesarias, o dónde se proveen de ella y de las otras cosas que faltan en dicho pueblo”, que:
[…] no tiene aceite, pero pan y vino y carne si, medianamente al año se coge para el pueblo aunque ordinariamente parte del ano van a comprar vino al Campo de Montiel y pan siete y ocho leguas de esta villa y el aceite veinte leguas de esta villa.
Y por lo tanto la producción era casi toda a nivel doméstico e interno, sin grandes producciones y había necesidad de comprar vino en los pueblos cercanos de la actual provincia de Ciudad Real. En el acuerdo, en el que no se estipula el precio, lo firman todos los representantes del ayuntamiento y se estipula que:
1.- Solo podía entrar el ganado lanar, pero no el cabrío, por ser las últimas más dañinas para la planta. En el caso de que con las ovejas entraran alguna cabra se multará al responsable con medio real de multa, que se sumará a la limosna para la iglesia.
2.- Que el periodo permitido para el acceso de los animales será solo de un mes desde el día en el que se produzca el remate de la vendimia y recogida de la uva.
Diferentes tipos de hoja de viña de uva negra: Tempranillo, tinta del país o cencibel, la variedad más extendida en España; nebbiolo, carbernet sauvignon y malbec, de izquierda a derecha.
Como apuntamos antes, la práctica de la venta de la pámpana era normal, sobre todo en municipios con gran extensión de vides. En el de Almansa, en 1577 Y 1578, se vendió la pámpana en los pagos de Majuelos y el Rubial, los Viñazos, los Cerezos, camino de Villena, Viñas Viejas y Viñadoñiga con el fin de poder financiar la construcción de la presa del pantano. En octubre de 1633, carente de fuente de ingresos de "propios", el concejo se vio obligado a vender la pámpana y la hierba de las viñas por esta vez, para cubrir los gastos de un pleito que mantenía con la localidad de Alpera y el 4 de octubre de 1637, el concejo almanseño autorizó el arrendamiento de tres pagos de viñas hasta el 30 de noviembre, día de San Andrés, para que los ganados se alimentasen con su hoja o pámpana:
Que se a dado petiçion por los vecions desta villa para que se venda las viñas de la panpana que tienen hasta San Andrés que biene con las condicççiones que se daran en la dicha petiçion, decretaron se pongan en almoneda y se arrienden los dichos tres pagos de viñas por el termino que se rreidan as dehesas deste concejo...
Estos datos los recoge Alfonso Arráez en su trabajo La viticultura en el corredor de Almansa desde sus orígenes a la Edad Moderna, publicado en 2018, en el que explica también que las sanciones impuestas por el concejo eran aplicadas a los que no respetaban las ordenanzas. De tal forma, en septiembre de 1633, Sebastián Romero estaba en la cárcel pública almanseña por haber producido ciertos daños en una viña de la que era arrendatario. Para salir de ella hubo que inmenizar al propietario con cierta suma de dinero. (3)
IMAGEN DEL DOCUMENTO DE 1585 DE VILLAPALACIOS:
TRANSCRIPCIÓN:
Ayuntamiento para vender la panpana de las viñas año 1585
Al margen añadido: (para la iglesia y para ayudar de enladrillarla)
En la villa de billapalacios a veinte dias del mes de octubre del año de myll quinientos y ochenta e cinco años este dia se juntaron en la sala del ayuntamiento della se juntaron el muy magnifico señor el licenciado andres garcia clerigo presbitero della horden del señor san pedro cura propio de la parroquial desta Villa y los magnificos señores Juan lopez vallestero y miguel martinez alcaldes hordinarios que del presente son y Cristobal del Val regidor y pero lopez osorio y alonso garcia vacarizo alcalde y regidor del año pasado y juan del cepillo y alonso rodriguez gonzalez y hernan sanchez de la corredera y cristobal de molina e francisco rubio diputados del dicho ayuntamiento y vezinos desta villa tratando de las cosas que conbiene del serbycio de dios nuestro señor y bien y pro de la republica dixeron que por quanto la yglesia mayor desta villa esta muy alcançada ansi para que de limosna se ayude para que arda la lanpara del santo sacramento como para solar y enadrillar la dicha yglesia atento questa tan pobre que con la renta que tiene no se puede fazer y la nezesidad de lo susodicho es mucha e para que a menos costa y sin perjuizio la dicha nezesidad sea remediada dixeron todos de un boto y parezer por ellos y en nombre delos demas vezinos desta villa que se bendan la panpana de los pagos de las viñas para comellos con ganado de lana y no de cabrio y que las dichas viñas no puedan los tales ganados comellas y en tiempo que llevaba y solo se a visto la benta dello no mas del tiempo que da la panpana y sea luego el goçar dellas por un mes contado desde el dia del remate y si uviera de fallar algunos dias que por agua no gozen que despues gozen otros tantos dias de manera que sea visto goçar de las dichas viñas un mes y lo que por ellas se diere se aquda con ello a el dicho señor qura para el dicho gasto y efeto solo valga la venta dello por este presente año y no por mas tiempo y si con el dicho ganado lanar entrare algun cabrio tenga de pena medio real la qual pena se aplica para la dicha limosna y la dicha pena sea ansi de noche como de dia y esto dieron por su boto y parezer avido su aquerdo y lo firmaron los que supieron a cada cabeça
El licenciado Andres Garcia
Francisco Rubio
Pero Lopez Osorio
Juan Lopez Ballestero
Pero Rodríguez
Alonso García Vacarizo
Alonso Rodríguez González
Joan Perez escribano
BIBLIOGRAFÍA:
(1). Ayuntamiento para vender la panpana de las viñas, 20 de octubre de 1585, en Actas del Ayuntamiento de Villapalacios, volumen I, fol. 1v. (1585- 1612). Archivo Municipal de Villapalacios.
(2). Relaciones Topográficas de Felipe II, Villapalacios, 1578, en esta misma página. Recogidas de las Relaciones topográficas de Felipe II, volumen III, folios 626-629. Real Monasterio de El Escorial, Madrid.
(3). Alfonso Arráez, La viticultura en el corredor de Almansa desde sus orígenes a la Edad Moderna, en El vino en la comarca de Almasa, Jornadas de Estudios Locales, número 13, Almansa, mayo 2018
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